Tal y como se señaló en un post anterior este observatorio de aves, obra del arquitecto D Manuel Fonseca y del ingeniero D José Ramón Negueruela fue ensamblado a pie de su emplazamiento y después puesto en su ubicación definitiva mediante una grúa autoportante de gran tonelaje.
La maniobra tuvo su dificultad, dada la necesidad de hacer pasar la estructura en el hueco entre dos árboles existentes en la margen del río.
El perfecto encaje de medidas y niveles entre la estructura y la cimentación testimonian la importancia de una buena preparación del trabajo.
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